jueves, 7 de junio de 2012

Volar (cuento de Roberto vera)


         Entonces, creí que podía hacerlo. Me estiré todo lo que pude y efectivamente estaba volando. Veía las casas del barrio, muy chiquitas allá abajo, y los pobladores que parecían hormigas. Fue una experiencia increíble.
Después quise hacer lo mismo, repetir esa la visión onírica conmovedora. Me dirigí al peñón del pueblo, y desde la cima, mirando el agua verde, me largué a volar.
Lógicamente fui a parar al fondo del mar. Todavía no se cómo pude salvarme.
        Si no fuera por el pulpo, que ahora es mi padre...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Divino este cuentito!! Me copó. Besos
Cecy Paladino

Anónimo dijo...

Hermsos este cuentito, tiene la misma ternura de otros que leí del mismo autor, Besos

Jéssica Abrevuch